Publicado por primera vez en enero de 2020 / Actualizado en febrero de 2023

La vitamina D es la vitamina más esencial para mejorar la salud y el bienestar de una persona. Según los estudios realizados, la vitamina D también puede ser fundamental para evitar las infecciones de las vías respiratorias superiores (URI, por sus siglas en inglés), conocidas popularmente como resfriado común. En los últimos años también se han publicado estudios sobre los efectos protectores de la vitamina D y las infecciones respiratorias víricas y las hospitalizaciones. En este artículo, examinaremos estos descubrimientos con más detalle.

¿Cómo se produce la vitamina D?

Nuestra piel puede fabricar vitamina D al pasar tiempo bajo el sol: las ondas de luz ultravioleta B (UV-B) del sol reaccionan con una forma de colesterol de nuestra piel para crear la hormona de la vitamina D. Sin embargo, durante los meses menos soleados, se genera menos vitamina D. Pasar tiempo suficiente al aire libre entre las 10 de la mañana y las 2 de la tarde, cuando el sol se encuentra a mayor altura en el horizonte, permite generar vitamina D. Los suplementos de vitamina D también son una excelente opción para la mayor parte de las personas.

Beneficios investigados de la vitamina D

Miles de estudios realizados a lo largo de la última década demuestran los beneficios para la salud que se obtienen cuando se optimizan los niveles de vitamina D. Estos estudios nos indican que las personas que tienen mayores niveles de vitamina D en la sangre presentan un menor riesgo de sufrir ataques cardíacos, diabetes, hipertensión arterial y otras complicaciones crónicas de salud.  

En mi consultorio del sur de California, se descubrió inicialmente que el 80 % de los pacientes presentaban carencia de vitamina D. Ahora consumen suplementos de esta vitamina. La incidencia de la carencia de vitamina D es mayor en los climas menos soleados.  

La vitamina D y las infecciones respiratorias

En un estudio de 2019 publicado en la revista International Journal of Environmental Research and Public Health se llegó a la conclusión de que las personas cuyos niveles de vitamina D en la sangre eran más elevados tenían un menor riesgo de padecer infecciones de la vías respiratorias superiores que aquellas cuyos niveles de vitamina D en la sangre eran inferiores. 

Dos estudios adicionales han respaldado estos descubrimientos. En primer lugar, existió un estudio de 2017 publicado en la revista British Medical Journal en el que los investigadores evaluaron 25 ensayos controlados aleatorizados, que incluyeron a 11.321 participantes cuyas edades comprendían desde bebés hasta personas de 95 años. 

La administración de suplementos de vitamina D redujo el riesgo de infección de las vías respiratorias superiores en un 12 %. Quienes presentaban niveles de vitamina D en sangre inferiores a 25 nmol/L (10 ng/dl) registraron el beneficio más notable y se observó una disminución del 70 % en la tasa de infecciones al tomar suplementos. En los pacientes con un nivel de vitamina D superior a 25 nmol/L (10 ng/dl), se observó una reducción del 25 % en las infecciones respiratorias tras la administración de suplementos.

Además, en un estudio de 2017 publicado en la revista Journal of the American Geriatric Society se comparó una dosis estándar frente a una cantidad elevada de vitamina D en personas mayores. El grupo de dosis alta de 55 personas recibió 100.000 UI de vitamina D3 al mes (~3300 UI diarias), mientras que el otro grupo de 52 personas recibió un placebo mensual o 12.000 UI al mes (~400 UI/día). El estudio se llevó a cabo durante cuatro años. Quienes tomaron la dosis alta de vitamina D presentaron un 40 % menos de probabilidades de sufrir una infección de las vías respiratorias superiores que los demás.

De 2019 a 2023, los investigadores han recopilado más datos sobre el papel protector de la vitamina D contra las infecciones respiratorias víricas. Durante los últimos años, muchos defensores de la vitamina D han confiado en sus beneficios, pero los investigadores han hallado últimamente pruebas que lo corroboran.  

Un estudio de 2022 sobre la vitamina D y la infección respiratoria vírica arrojó resultados interesantes. Se trataba de una revisión sistemática y un metaanálisis. Los investigadores no hallaron que la vitamina D pudiera reducir el riesgo de infección. Sin embargo, lo que sí descubrieron fue más importante. 

Descubrieron que quienes tomaban vitamina D y contraían una infección respiratoria vírica tenían un 65 % menos de probabilidades de terminar en la unidad de cuidados intensivos (UCI) de un hospital. Además, quienes tomaban suplementos de vitamina D también tenían un 54 % menos de probabilidades de morir, un resultado notable. 

Además de estas pruebas, en un estudio publicado en 2023 se hallaron resultados similares. En él, los investigadores evaluaron cinco ensayos controlados aleatorizados en los que participaron 798 pacientes en total. Los científicos concluyeron: “La evidencia actual apoya los beneficios de las intervenciones con vitamina D en pacientes hospitalizados con infecciones respiratorias virales debido al efecto protector proporcionado por la vitamina D contra el ingreso en la UCI y la mortalidad”.

Conclusión

En resumen, la mayoría de la población mundial presenta una carencia de vitamina D. Las pruebas demuestran que la vitamina D ayuda a proteger a las personas contra la mayoría de las infecciones de las vías respiratorias superiores. Sin embargo, existen pruebas sólidas de que la administración de suplementos de vitamina D en quienes contraen infecciones respiratorias víricas ayuda a prevenir la hospitalización en UCI y la muerte por infecciones respiratorias víricas. En general, la vitamina D cuenta con un largo historial de seguridad. La mayoría de los niños pueden tomar sin riesgo unas 1000 UI diarias, mientras que muchos adultos toman entre 2000 y 5000 UI diarias.  

En general, el perfil de seguridad de la vitamina D se ha establecido ampliamente. Si tiene alguna duda, consulte a su médico antes de tomar suplementos.

Referencias:

  1. Pham H, Rahman A, Majidi A, Waterhouse M, Neale RE. Acute respiratory tract infection and 25-Hydroxyvitamin D concentration: A systematic review and meta-analysis. Int J Environ Res Public Health. 2019;16(17):3020. Publicado el 21 de agosto de 2019. doi:10.3390/ijerph16173020
  2. Martineau Adrian R, Jolliffe David A, Hooper Richard L, Greenberg Lauren, Aloia John F, Bergman Peter et al. Vitamin D supplementation to prevent acute respiratory tract infections: systematic review and meta-analysis of individual participant data BMJ 2017; 356 :i6583
  3. Ginde AA, Blatchford P, Breese K, et al. High-Dose Monthly Vitamin D for Prevention of Acute Respiratory Infection in Older Long-Term Care Residents: A Randomized Clinical Trial.
  4. Mercola J, Grant WB, Wagner CL. Evidence Regarding Vitamin D and Risk of COVID-19 and Its Severity. Nutrients. 2020 Oct 31;12(11):3361. doi: 10.3390/nu12113361. PMID: 33142828; PMCID: PMC7692080.
  5. Hosseini B, El Abd A, Ducharme FM. Effects of Vitamin D Supplementation on COVID-19 Related Outcomes: A Systematic Review and Meta-Analysis. Nutrients. 20 de mayo de 2022;14(10):2134.
  6. Argano C, Mallaci Bocchio R, Natoli G, Scibetta S, Lo Monaco M, Corrao S. Protective Effect of Vitamin D Supplementation on COVID-19-Related Intensive Care Hospitalization and Mortality: Definitive Evidence from Meta-Analysis and Trial Sequential Analysis. Pharmaceuticals (Basel). 2020;13(1):15.